Laura Vinós, Fran Baena y Ramón Muñoz presentan “Jewel Quest”, una propuesta pictórica en la que cada artista “busca la joya” dentro de su propia pieza. Como si del famoso videojuego de rompecabezas creado en 2004 se tratase, los autores nos invitan a indagar en estos retratos y “encontrar la gema”.

Procedentes de Andalucía y nacidos a finales de los 90´, han crecido en una generación en la que apenas han tenido conciencia de unos años con aparente estabilidad económica, pero si bajo el sol de una tierra donde se da el caldo de cultivo perfecto para la creación plástica contemporánea. 

Pese a ser Andalucía un lugar que invita a los creadores a salir a la calle y establecer intercambios en lo que se plantea cómo se va a representar hoy en día la pintura figurativa, han crecido haciendo scroll en la pantalla, por lo que la cantidad de información a la que han tenido acceso es infinita.

En esta presentación para B4 Garage Seoul en colaboración con Yusto Giner veremos como 3 artistas zoomers han encontrado la joya dentro de todo el vertedero de información que les rodea en 2023.

Laura Vinós (Córdoba, 1998) es graduada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, finaliza sus estudios con una beca Erasmus en la Universidad de Évora (Portugal). Su trabajo parte de un imaginario simbólico-tanto universal y arquetípico como dúctil a la cultura de nuestra época- que recrea elementos conformando escenas donde lo fragmental se experimenta como un conjunto, construido gracias a distintas fuentes pre-existentes que vuelven a nacer.

Estas imágenes resultan un largo poema, un todo abundante en sugestión- incitando a conjeturas encuanto a lo que se narra. La pintura se aleja así de lo literal o evidente, juega entre significados, signos y asociaciones, ayudándose también del lenguaje como elemento lúdico visual.

Para B4, coge como excusa la familia de Gianni Schicchi [ópera de Puccini: Gianni (padre de Lauretta) Rinuccio (enamorado) Lauretta (hija) Zita (madre de Rinuccio)] ; la idea de las piezas viene pensando en hacer cuatro cartas estilo »reúne a la familia » y los juegos de »encuentra las siete diferencias», dividiendo cada carta en dos y haciendo así »espejos» de cada personaje.

Fran Baena (Priego de Córdoba, 1999) se compromete con la juventud de la Tragicomedia Contemporánea. Existencialista y testigo de la ironía contra la tristeza a través de la imagen digital en redes sociales. Parte de una pintura ligada a las estéticas post-internet, atendiendo a sus poéticas políticas en el proceso de trabajo.

Le interesa cómo esas imágenes consumidas en la web afectan al arte con formatos grandes, el temple al huevo y las telas de preparación casera cuya seriedad tradicional agrega relevancia a la tristeza ocultada por el consumismo de la felicidad; el paso a físico de una pintura articulada previamente en Instagram stories con el pincel redondo; o la lija y el gotelé como enlace poético con la ansiedad.

En “Jewel Quest” vemos a 4 personajes que le han ayudado a encontrarse a sí mismo, 5 obras en las que aparecen un personaje histérico y desquiciado, David Foster Wallace, Albert Camus, Eduardo Arroyo y Ana Barriga. Fran busca la salida a la tristeza en filósofos, novelistas, etc…

Ramón Muñoz, nacido en El Puerto de Santa María, Cádiz (1998). Estudió Bellas Artes en la Universidad de Sevilla, donde realizó también el Máster de Idea y Producción. Su obra parte de conceptos como duda, dualidad identitaria y ensimismamiento para abordar la representación del yo en espacios ambiguos, simulados o representados a partir o no de un modelo de referencia. De este modo, la pintura ofrece escenarios inquietantes, cargados de ambigüedad y de una ironía sutil que buscan estimular al espectador, poniendo el foco en lo que está por ser descubierto.

Busca trasladar situaciones cotidianas a un lenguaje pictórico personal para generar así una nueva visión de la realidad, la cual nace en lo autobiográfico y busca afrontar de un modo más liviano problemas de la sociedad actual. Su pintura recoge todas aquellas vivencias que han estado presente de algún modo durante el proceso creativo. La suma de estos factores busca alejar al espectador de la realidad ordinaria, ofreciéndole una pausa e invitándole a recorrer ese universo que se conforma entre la representación y la evocación.

Estas piezas tienen una o dos figuras que interactúan con un objeto. Son situaciones no explicitas donde el misterio siempre queda fuera de la escena, potenciando la poética y lo que está por descubrir. En esta ocasión quiere tratar lo exótico, que va reflejado de algún modo en las piezas.

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